Los cambios en el planeta son muchos, el efecto invernadero, la capa de ozono, etc. El clima es uno de los cambios más notorios. Las olas de calor se repiten cada vez con mayor frecuencia. Por ello es que para poder disfrutar del verano a pleno sin descuidar tu salud debes estar prevenido. Lo más recomendable es tomar algunas precauciones con el calor al ingresar a la piscina.
La importancia del protector solar
Al exponerte al sol, debes proteger tu piel. Esos cuidados te protegerán de posibles quemaduras, envejecimiento prematuro, e incluso del cáncer de piel. Es imprescindible usar un protector solar adecuado.
Es conveniente leer las características del producto en su etiqueta. Debe proteger contra los rayos UVA y UVB. Según la recomendación de los expertos, el factor no debe ser inferior a 25 y puede llegar hasta 50.
Te lo debes aplicar 30 minutos antes de ingresar a la piscina, y luego repetir la aplicación cada 2 horas o en el momento que sales de la piscina.
Como evitar el golpe de calor
Necesitas estar bien hidratado. No importa que estés en la piscina. Debes beber mucho líquido. Preferentemente que sea agua fresca.
Asimismo, no es conveniente que te mantengas expuesto al sol por períodos prolongados. Es preferible que alternes con intervalos donde estés a la sombra.
De igual manera, es conveniente que mantengas tu cabeza mojada mientras estás en la piscina.
Los síntomas que presenta un golpe de calor son fiebre, vómitos, dolor de cabeza y malestar general. Ante la presencia de cualquiera de ellos es recomendable que consultes con tu médico.
El calor y la hidrocución
La hidrocución es el choque de temperaturas entre la del cuerpo, que está caliente por el calor, y la del agua de la piscina. Como consecuencia, la persona incluso puede llegar a perder el conocimiento.
Esto no tiene nada que ver con el mal llamado “corte de la digestión” si se meten en la piscina, enseguida después de almorzar. Generalmente en verano, se come liviano, por lo que no puede perjudicar meterse en la piscina enseguida.
Sin embargo, puede inducir a una hidrocución, si te metes inmediatamente después de comer una comida abundante y con muchas calorías.
La sugerencia es que, antes de entrar al agua, darse una ducha templada o fría. De esta manera, se refresca el cuerpo y puede nivelar su temperatura con la del agua.
Cuidados para poner en práctica después de salir de la piscina
Cuando ya decides salir de la piscina y no volver a entrar, es conveniente darse una ducha. Estar sumergido en agua clorada más la exposición al sol hacen que tu piel y tu cabello se resequen.
Además, te conviene hidratarte la piel y también el pelo con productos adecuados para tal fin.
A su vez, es recomendable que te quites el traje de baño mojado, ya que incide en el desarrollo de hongos en la piel.
Teniendo en cuenta estos cuidados para antes y después de la piscina, podrás disfrutar de tu verano a pleno sin descuidar tu salud.