La natación, como ya sabemos, es un deporte tan beneficioso como pocos. Sin embargo, ¿sabías de todos los beneficios de vencer la pereza y aventurarse a usar la piscina en invierno?
El agua fría tiene la maravillosa propiedad de conservar y restablecer la salud. Así es como, desde la antigüedad, el agua fría ha sido utilizada como tratamiento natural. Eran bien conocidos, sus efectos sobre la salud, el estado de ánimo e incluso sobre la vida sexual. Estos son solo algunos de sus beneficios.
En esta época de invierno puedes darle un uso terapéutico a tu piscina, que llevara a tu salud a un nivel de bienestar. Por ello es que construir una piscina en tu casa, te ofrece grandes ventajas
“Cuando se emplea agua fría, no es el frío el que cura, sino al contrario, es el calor producido por reacción contra el frío; el agente curativo es la misma naturaleza”. “Vicente Priessnitz”
8 beneficios de bañarte con agua fría
Usar la piscina en invierno facilita la recuperación muscular y rendimiento físico
Los deportistas saben de sus beneficios, después de entrenamientos intensos para acelerar la recuperación muscular. Al usar la piscina en invierno, el agua fría es un aliado excepcional, ya que reduce agujetas o (dolor muscular de aparición tardía), inflamaciones musculares, micro roturas fibrilares, tendinitis, etc.
Sistema inmunológico
Cuando tenemos contacto con el agua fría, nuestro sistema inmunológico produce glóbulos blancos que se encargan de protegernos de infecciones y otras enfermedades.
Activa el metabolismo
Nuestro cuerpo nos mantiene a una temperatura regulada a 36°. Al contacto con agua fría esta baja de manera radical. Nuestra piel se tensa, se cierran los poros, los músculos tiritan (tiemblan de frío) para mantener el calor. Por lo cual, estaremos quemando calorías y tonificando músculos sin necesidad de nadar.
Usar la piscina en invierno mejorará tu humor
Con el agua fría vas a tener más energía y mejor humor. Te va a ayudar a eliminar el estrés, además de dormir bien, ya que el agua fría estimula tu respiración y activa los neurotransmisores.
Oxigena el cuerpo, mejora la circulación sanguínea
Al sumergir el cuerpo en agua fría, nuestro corazón responde con un aumento en el ritmo de latidos que se traduce en un mayor estímulo muscular y un envío más eficiente de sangre hasta nuestros órganos. Esto genera una mejora en el sistema circulatorio y por efecto en todo el cuerpo.
Eliminación de sustancias tóxicas
Las venas se contraen eliminando sustancias tóxicas en la sangre, al igual que el líquido del sistema linfático que transporta desechos de las células y glóbulos blancos, se encarga de eliminarlas fuera de la piel.
Piel y cabello
Como ya mencionamos, el agua fría produce un mejor riego sanguíneo, por lo tanto, oxigena mejor la piel, dándole no solo un mejor aspecto sino también entregándole más nutrientes, generando una piel tensa e hidratada en el cabello tiene igual efecto. Al eliminar la gran mayoría de toxinas se indica en tratamientos de diferentes afecciones dérmicas.
Fertilidad y producción de testosterona
Al contrario del calor que desfavorece su producción en caso de los hombres, el agua fría ayuda a incrementar los niveles de testosterona por lo tanto aumentan la calidad y cantidad de espermas.
Las anteriores son razones suficientes para atreverse y quitar ese miedo al agua fría, pero identifiquemos todavía más beneficios; como los espartanos, que consideraban débil a aquel que no se bañaba en agua helada, ya que era parte de la rutina después de dos horas de ejercicio que los mantenía energéticos, resistentes y resilientes.
También se va a fortalecer la voluntad de salir de la zona confortable, tu autoestima también se lleva su parte.